[Misión sorpresa - La Gran cacería de Leviathanes]
Dificultad: SS+
Tiempo límite: 10 minutos
Recompensa: La lágrima del Leviathan
Penalización: -5 Niveles
*Los Leviathanes son animales de naturaleza pacífica y bondadosa. Navegan por los cielos y se alimentan de montañas.
*Despiadados humanos han construido sus ciudades sobre estas simpáticas criaturas y sus magos los dominan con un arnés mental.
*Acaba con su sufrimiento o con los parásitos que los plagan.
"¡Su majestad, la ciudad ha sido completamente evacuada, ya no hay nada que nos retenga aquí! ¡No hay nada que podamos hacer contra los dioses del cielo!"
Glob era rey del reino de Pixeland, el más progresista de la historia, pero ante todo era un gourmet. Mmmm... Ojo de Leviathan frito en su grasa. ¡Menuda delicia! ¡Ojalá hubiera catástrofes como aquella todos los días!
"No hay nada que podáis hacer contra ellos".
"¿Como dice, su majestad? No entiendo lo que quiere decir..."
Una esfera de luz surgió de la mano de Glob. Se relamió los labios. Docenas de cañones mágicos dispararon hacia el cielo.
¡Qué bonito, era la fusión de unos fuegos artificiales con una barbacoa gigante! El generoso dinero del contribuyente había sido bien empleado. Ser rey en aquel juego tenía sus ventajas. Lo malo, los mejores sabores siempre venían de las cosas más asquerosas. Su eterno odio por los programadores del juego surgió por unos segundos, pero el olor a Leviathan chamuscado le devolvió a la realidad.
¡Aquel iba a ser un banquete Real! Pero no se olvidaba de sus súbditos. Estos tendrían el honor de verle degustar aquel banquete que ellos habían pagado. Ser rey consistía, sobre todo, en tener claros los principios de igualdad, justicia y libertad.
@AlbertAntunez
¿Quiénes eran ellos? Depende de a quién le preguntes.
Los esclavos de artillería, los únicos capaces de contenerlos con toneladas de metal ardiente, los llamaban Suhuru; los que nacieron del vacío.
Los tecno-pirománticos, aquellos que podían cegarlos brevemente con su fuego atómico, los apodaron Zktaz; los Insaciables.
Las legiones cárnicas, tropas prescindibles cuya finalidad era distraerlos, los bautizaron como Kura-Zura; Absorbe-almas.
La orden Escarlata, caballeros capaces de atraerlos con el brillo de sus armaduras, les maldijeron con el nombre de KreToot; Los que comen sin descanso.
La Casta Olvidada, a los que no se debería mencionar, popularizaron el termino sut, que significa a la vez libertad, y muerte.
Y nosotros, los Escribanos, que registramos la caída de nuestro planeta como penitencia, los clasificamos con el nombre de yUrA; El final de todo, en nuestra vieja lengua.
Sin embargo el nombre más usado, y que fue acuñado por los propios dioses, fue el de Troo´Yat.
Pues los divinos, infinitos e inconmensurables, nunca han destacado por su genialidad e imaginación. Troo´Yat significa literalmente en la lengua de los cielos: Peces voladores que no tienen patas.
@CristiancHessel
Y así acabaron con una guerra que tanto horror trajo al mundo; los haces de luz atravesaron a las criaturas y se desplomaron con las pérfidas guaridas que cargaban a sus espaldas. Murieron quienes las controlaban y los supervivientes lograron al fin respirar en paz tras su hazaña.
Aunque, bien, no fue el final de la guerra, sino un punto y aparte. Esta jamás tendría fin mientras la raza humana viviera.
"Origen desconocido. Se especula que surgieron luego de la guerra nuclear de hace 300 años, con todo y civilizaciones. Al parecer sus habitantes no pasan necesidad, pues es posible notar un aumento en las edificaciones año con año..."
-Dinokon, biólogo de mutantes. 05/08/2344.
@eltreceavohijo
Una vez cada año unos seres bajan de los cielos y conectan las ciudades y aldeas que cargan bajo sus espaldas con la tierra para los intercambios económicos. Aquellos monstruos alados eran del reino de los cielos, un país que casi todo el año se encuentra aislado, pero está muy centrado en los estudios de la magia y la alquimia.
Ellos nos proporcionan esos conocimientos, mientras que nosotros les damos nuestros avances tecnológicos y de técnica. Un intercambio vital para nuestras supervivencias.
@jesusakacarton
Llegaron cuando el sol estaba en lo más alto y con la intención de arrebatarnos nuestro más preciado tesoro: la capacidad de cometer errores.
Pero algunos de nosotros ya lo habían soñado, y los demás les creímos y preparamos juntos la defensa. Haces de luz pura atravesaron al invasor y este se desintegró como si nunca hubiera existido, como si sus verdades hubieran sido, simplemente, vistas tal cual eran. Ya no engañarían a nadie.
Ya podíamos ser libres.
El mundo estaba en plena guerra, no luchaban contra guerreros ni reyes. Luchaban contra unas criaturas enormes que amenazaban su mundo, sus vidas. Habían derribado a unos cuantos pero siempre aparecían más, los reyes se habían unido para acabar con la amenaza.
Las criaturas lanzaban gotas de fuego y gritos ensordecedores. La gente no podía dormir ni salir corriendo. Las flechas se clavaban en la piel de las criaturas, pero lo único que hacía algo era la magia, les ahogaba y las armas que les traspasaban la piel y hacían boquetes en ella.
Llevaban luchando varios meses, corriendo hacia otro lugar hasta que ellas cubrían el cielo y acaban con la felicidad y la tranquilidad de la gente. Los reyes estaban reunidos, tratando de ver qué hacer. Habían llegado a un acuerdo, lanzarían todas las armas hacia ellos.
Y los hechiceros usarían su magia para ahogarles y traer la paz y la felicidad de nuevo. En el suelo, el hechicero de un reino se colocaba junto a un luchador con un arma. Sonrieron, llevaban juntos tanto tiempo que conocían bien al otro. A su lado dos chicas se miraban, asustadas pero con ganas de acabar con todo. Sonrieron y respiraron hondo, el aire hechizado y contaminado se coló en sus pulmones y varios tosieron. Tras diez horas de luchas y pérdidas consiguieron acabar con las criaturas, que ahora solo eran un recuerdo de pesadilla en el suelo.
La gente comenzó a hacer su vida de nuevo, recordando a los caídos y a los reyes que habían luchado. El hechicero y el luchador se unieron a la pareja de chicas en la taberna tras dos meses de recuperación necesaria, para pasar el rato. Todo había acabado. Por fin.
¿Por qué tenía miedo? ¿No era esto lo que tanto estaba esperando con mi lucha?
Esos seres habían aparecido gracias a mis esfuerzos, venían para purgar la tierra del mal que lo había estado contaminando durante siglos, ¡esos espíritus son benévolos!
Entonces... ¿por qué no podía parar de temblar? Al ser la invocadora que les había traído, no quedaban dudas de la pureza que emanaba de mi cuerpo, lo que debía permitirme transmitirla por medio del poder de dichos espíritus.
Esos gritos que escucho tienen que ser de agradecimiento... ¿verdad? Porque la gente grita agradecida de que les esté purgando...
¿...verdad?
@Shadshakia
Los Zlhoaghar se alzaban imponentes, cubriendo casi la totalidad del cielo, privando las tierras de luz natural. Seres inmortales que consideraban la vida humana como algo insignificante. Sabían que, si lo deseaban, podrían exterminar a todos y cada uno de los habitantes del que se había convertido en su nuevo hogar, y que los conjuros de protección mágica no podrían destruir sus titánicos cuerpos.
Para los humanos, estas criaturas simbolizaban una condena; para ellos, el mundo solo era un patio de recreo, un lugar sobre el que volar en paz.
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